“T.R.A.P.”: por la diversidad sexual, contra el patriarcado
El barilochense Manque La Banca dirigió el cortometraje que compite por el Oso de Oro en la Berlinale. Aquí cuenta sobre el proyecto y de cómo es filmar en corto.
El cortometraje argentino está muy bien representado este año en el 68 Festival Internacional de Cine de Berlín, donde el cineasta barilochense Manque La Banca compite por el Oso de Oro con el misterioso, lúdico e inclasificable “T.R.A.P.”.
Acostumbrado a transitar el cine experimental con propuestas estéticamente arriesgadas y de bajo costo, La Banca llegó a la Competencia Oficial de la Berlinale con un cortometraje en 16 milímetros inspirado en el universo del Romanticismo, que parte de una expedición de guerreros medievales y evoluciona sorpresivamente hacia una errancia juvenil anclada en la actualidad, contracultural y opuesta a los discursos patriarcales.
“Una línea de exploración del corto es la diversidad sexual como forma de resistencia al discurso dominante. Con mis compañeros venimos investigando la ruptura de estereotipos a través de las imágenes. Estamos convencidos como artistas audiovisuales que para desarmar las estructuras de poder que rigen al mundo es necesario construir relatos que se corran de la lógica heteronormativa”, afirmó La Banca en diálogo con Télam.
P- ¿De dónde surge la idea de “T.R.A.P.”?
R- Empecé a escribir “T.R.A.P.” luego de un proceso de investigación que tuvo como eje al Romanticismo. Esta vanguardia artística desarrolló toda una estructura de ideas entorno de la naturaleza como una fuerza incontrolable imposible de dominar. Las reflexiones de este movimiento surgieron en pleno proceso de industrialización y racionalización de la cultura burguesa. Con el objetivo de contrarrestar estos efectos que el capitalismo estaba imponiendo sobre la cultura mundial, los románticos comenzaron a producir obras en las que el hombre se veía reducido a una mínima expresión en relación con los grandes paisajes que los rodeaban.
P- ¿Y cómo trabajaste a partir de esas referencias?
R- Teniendo estás líneas estéticas como punto de partida quise construir un relato que arrancara desde ese universo romántico y se fuera desarmando hasta convertirse en un relato contemporáneo intimista, que muestre una faceta de los jóvenes disidentes en esta Argentina actual gobernada por la derecha política más conservadora que el país ha tenido en los últimos 40 años.
P- ¿Por qué filmaste en 16 milímetros? ¿Qué posibilidades creativas te ofrece el fílmico?
R- Mi primer experiencia artística con el soporte fílmico fue en 2012 cuando formé parte del equipo de “Archivo Expandido”, una obra de cine expandido dirigida por Magdalena Arau que contenía proyecciones en película Súper 8. Luego hicimos una gira europea y ahí conocí a Leandro Listorti, que estaba a cargo de los proyectores que se ejecutaban durante la performance. Un día en París me prestó su cámara Súper 8 y filmé mi primer rollo. Cuando mandé a revelar y proyecté esas imágenes no podía creer lo que sucedía, aquella realidad fragmentada por el encuadre explotaba de luz, los colores verdes y rojos saturados a un nivel que jamás había logrado con el soporte digital, quedé flasheado y de ahí no paré de utilizar la película fotoquímica.
P- ¿Y en el caso de “T.R.A.P.”?
R- El registro de T.R.A.P se realizó con una cámara a cuerda con película 16 milímetros color vencida, generando un sistema de rodaje condicionado por la misma técnica. Filmar de esta manera es un acto de resistencia frente a la velocidad que el mundo contemporáneo propone. Nuestro rodaje se realizó con 25 minutos de material virgen y cada plano, cada puesta de cámara, cada encuadre se pensó, se reflexionó y se ejecutó prácticamente sin posibilidad de retoma. En fílmico la imagen adquiere un carácter pictórico similar al efecto que genera un pintor en un lienzo. Los contornos de los elementos no son perfectos, son difusos, ahí está la magia.
P- ¿Encontrás en el formato cortometraje un paso necesario hacia un largo o, por el contrario, un espacio de expresión con reglas propias donde poder investigar tus inquietudes artísticas?
R- Me parece que ambas ideas son válidas. “T.R.A.P” como corto es un paso previo a un futuro largometraje que se llamará “Jermans”. El mundo planteado en el corto, tanto sus personajes como los escenarios y la idea de estructura narrativa que se desarma, que pasa de ser una historia de época a una propuesta contemporánea, forman parte de un universo más grande que se desarrollará en la película. Sin embargo, nos dimos ciertos lujos que son propios del formato corto, como introducir imágenes de otros proyectos sin dar explicaciones o dejar ciertos hilos narrativos sin cerrar. En los cortos, por su duración reducida, uno puede experimentar ideas y probar cosas sin necesidad de darle tanto desarrollo, lo cual genera una sensación de libertad súper orgásmica.
“T.R.A.P.”
Ficha técnica
Título: “T.R.A.P.”
Dirección: Manque La Banca
Producción: Tobías Cédola
Asistencia de Dirección: Pilar Falco
Dirección de Fotografía de Pablo Huerta
Cámara: Juani Angaroni
Vestuario: Gonzalo Giacchino
Escenografía: Paula Alonso
Música de Antu La Banca
Elenco: Teo Palvi, Julia Sbriller y Antu La Banca
El cortometraje argentino está muy bien representado este año en el 68 Festival Internacional de Cine de Berlín, donde el cineasta barilochense Manque La Banca compite por el Oso de Oro con el misterioso, lúdico e inclasificable “T.R.A.P.”.
Acostumbrado a transitar el cine experimental con propuestas estéticamente arriesgadas y de bajo costo, La Banca llegó a la Competencia Oficial de la Berlinale con un cortometraje en 16 milímetros inspirado en el universo del Romanticismo, que parte de una expedición de guerreros medievales y evoluciona sorpresivamente hacia una errancia juvenil anclada en la actualidad, contracultural y opuesta a los discursos patriarcales.
“Una línea de exploración del corto es la diversidad sexual como forma de resistencia al discurso dominante. Con mis compañeros venimos investigando la ruptura de estereotipos a través de las imágenes. Estamos convencidos como artistas audiovisuales que para desarmar las estructuras de poder que rigen al mundo es necesario construir relatos que se corran de la lógica heteronormativa”, afirmó La Banca en diálogo con Télam.
P- ¿De dónde surge la idea de “T.R.A.P.”?
R- Empecé a escribir “T.R.A.P.” luego de un proceso de investigación que tuvo como eje al Romanticismo. Esta vanguardia artística desarrolló toda una estructura de ideas entorno de la naturaleza como una fuerza incontrolable imposible de dominar. Las reflexiones de este movimiento surgieron en pleno proceso de industrialización y racionalización de la cultura burguesa. Con el objetivo de contrarrestar estos efectos que el capitalismo estaba imponiendo sobre la cultura mundial, los románticos comenzaron a producir obras en las que el hombre se veía reducido a una mínima expresión en relación con los grandes paisajes que los rodeaban.
P- ¿Y cómo trabajaste a partir de esas referencias?
R- Teniendo estás líneas estéticas como punto de partida quise construir un relato que arrancara desde ese universo romántico y se fuera desarmando hasta convertirse en un relato contemporáneo intimista, que muestre una faceta de los jóvenes disidentes en esta Argentina actual gobernada por la derecha política más conservadora que el país ha tenido en los últimos 40 años.
P- ¿Por qué filmaste en 16 milímetros? ¿Qué posibilidades creativas te ofrece el fílmico?
R- Mi primer experiencia artística con el soporte fílmico fue en 2012 cuando formé parte del equipo de “Archivo Expandido”, una obra de cine expandido dirigida por Magdalena Arau que contenía proyecciones en película Súper 8. Luego hicimos una gira europea y ahí conocí a Leandro Listorti, que estaba a cargo de los proyectores que se ejecutaban durante la performance. Un día en París me prestó su cámara Súper 8 y filmé mi primer rollo. Cuando mandé a revelar y proyecté esas imágenes no podía creer lo que sucedía, aquella realidad fragmentada por el encuadre explotaba de luz, los colores verdes y rojos saturados a un nivel que jamás había logrado con el soporte digital, quedé flasheado y de ahí no paré de utilizar la película fotoquímica.
P- ¿Y en el caso de “T.R.A.P.”?
R- El registro de T.R.A.P se realizó con una cámara a cuerda con película 16 milímetros color vencida, generando un sistema de rodaje condicionado por la misma técnica. Filmar de esta manera es un acto de resistencia frente a la velocidad que el mundo contemporáneo propone. Nuestro rodaje se realizó con 25 minutos de material virgen y cada plano, cada puesta de cámara, cada encuadre se pensó, se reflexionó y se ejecutó prácticamente sin posibilidad de retoma. En fílmico la imagen adquiere un carácter pictórico similar al efecto que genera un pintor en un lienzo. Los contornos de los elementos no son perfectos, son difusos, ahí está la magia.
P- ¿Encontrás en el formato cortometraje un paso necesario hacia un largo o, por el contrario, un espacio de expresión con reglas propias donde poder investigar tus inquietudes artísticas?
R- Me parece que ambas ideas son válidas. “T.R.A.P” como corto es un paso previo a un futuro largometraje que se llamará “Jermans”. El mundo planteado en el corto, tanto sus personajes como los escenarios y la idea de estructura narrativa que se desarma, que pasa de ser una historia de época a una propuesta contemporánea, forman parte de un universo más grande que se desarrollará en la película. Sin embargo, nos dimos ciertos lujos que son propios del formato corto, como introducir imágenes de otros proyectos sin dar explicaciones o dejar ciertos hilos narrativos sin cerrar. En los cortos, por su duración reducida, uno puede experimentar ideas y probar cosas sin necesidad de darle tanto desarrollo, lo cual genera una sensación de libertad súper orgásmica.
“T.R.A.P.”
Ficha técnica
Título: “T.R.A.P.”
Dirección: Manque La Banca
Producción: Tobías Cédola
Asistencia de Dirección: Pilar Falco
Dirección de Fotografía de Pablo Huerta
Cámara: Juani Angaroni
Vestuario: Gonzalo Giacchino
Escenografía: Paula Alonso
Música de Antu La Banca
Elenco: Teo Palvi, Julia Sbriller y Antu La Banca
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